El lunes 26 de noviembre salió a la luz la historia de que científicos chinos en Shenzhen habían modificado embriones humanos con tecnología CRISPR para la edición genómica reproductiva. Las informaciones iniciales sobre la historia fueron bastante incompletas, sin el proceso científico normal de los artículos publicados en revistas científicas, que se acompañan de datos extensos y de su revisión por expertos. Esta falta de hechos hace que sea probable que surjan más detalles sobre esta historia durante la próxima semana.
Modificar el genoma de los embriones ha sido durante mucho tiempo una posibilidad real, pero debido a las estrictas legislaciones en los países europeos, esos experimentos no ocurren en Europa. Esta publicación del blog proporciona un breve resumen de la tecnología CRISPR y algunas ideas para ayudar a los periodistas y al público en general a comprender mejor el contexto.
Hay tres puntos principales que quiero transmitir. El primero es que este tipo de ciencia necesita una normativa sólida en la que la sociedad pueda confiar. El segundo es que creo que este fue un estudio inapropiado que es casi ciertamente no ético en un contexto europeo. Finalmente, los aspectos específicos del estudio han sido mal diseñados y no tienen los estándares de rigor de un estudio científico.
CRISPR es un acrónimo usado para describir un descubrimiento notorio de la última década con el que se pueden realizar ediciones muy precisas en genomas. La tecnología funciona de manera muy amplia en diferentes especies (desde plantas hasta animales), y aunque hay una gran cantidad de detalles a mejorar, en términos generales significa que podemos cambiar cualquier “letra” específica de un genoma por otra letra.
Hoy en día CRISPR se usa ampliamente en investigaciones básicas y, desde su descubrimiento, la gente se dio cuenta de que potencialmente podría usarse para editar genomas humanos. Un uso médico de CRISPR es editar las células en un cuerpo, por ejemplo, células de los ojos o células musculares, y cambiar esas células para corregir un defecto genético. Esto es, en cierto sentido, similar a las discusiones sobre terapia génica en los años 80 y 90. Además, es posible editar embriones en la etapa de una sola célula (“el cigoto”) para realizar un cambio genético que esté presente en todas las células de un individuo.
En los países desarrollados, este tipo de procedimientos están regulados como parte de la fertilización in vitro (FIV) y la salud reproductiva en general, donde el esperma y los óvulos se encuentran en una placa, y los embriones resultantes se implantan de nuevo en la madre. Este procedimiento puede ayudar a las parejas que no pueden concebir de forma natural.
Además, en muchos países, las parejas portadoras de enfermedades genéticas graves pueden analizar genéticamente sus embriones en una etapa temprana, mientras todavía están en una placa. Las parejas pueden optar por implantar únicamente aquellos embriones que no porten la enfermedad genética. Esto se llama Diagnóstico Genético Preimplantacional (DGP). Estos procedimientos se han implementado desde la década de 1990 bajo estrictas legislaciones nacionales, y muchos niños han sido concebidos de manera segura utilizando este método.
El enfoque CRISPR añadiría el paso adicional de introducir la tecnología CRISPR en la etapa de una sola célula; seguido de un análisis para una modificación exitosa. Aunque esto es técnicamente posible, actualmente no hay enfermedades genéticas graves* en las que el DGP no funcionaría, pero CRISPR sí lo haría.
Por lo que sabemos sobre el ejemplo chino, los investigadores buscaban editar el genoma para eliminar un gen específico (CCR5) en el que se sabe que la eliminación protege la transmisión del VIH (las familias tenían un miembro VIH positivo, razón por la que se les eligió). Creo que este es un estudio erróneo, inapropiado y poco ético. En primer lugar, ya existen formas completamente apropiadas de proteger a los niños de la transmisión del VIH sin cambiar la genética. En segundo lugar, no conocemos todas las consecuencias de esta eliminación, más allá de la transmisión del VIH. En tercer lugar, un procedimiento tan nuevo requiere que las consideraciones tanto éticas como de seguridad sean ampliamente debatidas. Desde mi perspectiva, este estudio chino fracasó en todos estos aspectos. Es un procedimiento totalmente inadecuado y creo que sería ilegal en todos los países europeos.
Es posible que en el futuro conozcamos más sobre combinaciones genéticas específicas y sobre la seguridad de usar CRISPR en embriones a través de estudios exhaustivos en animales. Esto nos permitiría considerar cómo usar esta tecnología de manera responsable. Sin embargo, esto requerirá una cantidad significativa de investigación y nueva normativa. Además, es probable que en un futuro cercano el DGP sea una opción viable para padres sanos. Sin embargo, vale la pena pensar en una normativa razonable antes de que tengamos que tomar decisiones prácticas sobre el uso de CRISPR en embriones. De manera similar a las tecnologías de FIV y DGP en décadas anteriores, la sociedad debe tener confianza en la normativa sobre el uso de la tecnología CRISPR. Por ejemplo, en el Reino Unido, la Autoridad de Embriología y Fertilización Humana proporciona una regulación en este ámbito, que ha sido incorporada a la legislación del Reino Unido . Esto permite que las nuevas tecnologías, como la donación mitocondrial, se desarrollen de una manera que sea médicamente segura, científicamente y éticamente sólida y que cuente con el apoyo de la sociedad.
Esto es una traducción de una entrada de blog escrito por Ewan Birney, Director Conjunto de EMBL-EBI – CRISPR babies – a consideration of the science and ethics.
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*Hay ocasiones en las que si los dos padres son homocigotos debido a una enfermedad genética grave y quieren tener hijos, la única opción de proporcionar un genoma sin el defecto seria editarlo, parecido al DGP. Cuando se habla con genetistas clínicos en ejercicio, este escenario en particular no ha llegado a producirse en la práctica, pero simplemente por el gran número de personas en el mundo, debe suceder dentro de un rango de probabilidad extremadamente excepcional. Sin embargo, existen otras enfermedades genéticas, también inusuales pero que se han podido observar en mi pequeña muestra de genetistas clínicos, en los cuales los padres están casi seguros que van a transmitir un defecto genético, pero que no se pueden resolver fácilmente con la edición del genoma, como las translocaciones balanceadas. El otro caso en el que los padres tampoco podían usar DGP es el de la enfermedad genética mitocondrial, que solo se transmite a través de la madre y de forma genéticamente diferente. Esto ha sido resuelto a través de la donación mitocondrial, una técnica avanzada de reproducción asistida que pasó por los procedimientos de la regulación de la HFEA durante su investigación, desarrollo y aplicación.